El Decano planta cara en Motril al líder


Bajo una tarde primaveral en Motril pese a estrenar el mes de noviembre con el aroma a historia que se respira en cada salida del CD Alhaurino, el Decano volvió a dejar claro que más allá del resultado, su alma competitiva sigue intacta. En el césped natural del mítico Escribano Castilla, el conjunto de Francis García ofreció una batalla de orgullo, táctica y fe ante un CF Motril que defiende con puño de hierro su liderato en la Tercera Federación.

El duelo arrancó con un Alhaurino muy bien plantado sobre el verde, replegado con orden y disciplina, esperando su momento para sorprender. No tardó en avisar el Decano: apenas en el minuto tres, Andy filtró un pase de seda hacia Berguillo, que con la puntera rozó el primer tanto, aunque la jugada quedó invalidada por fuera de juego. Fue el preludio de lo que vendría: un equipo visitante sin complejos, valiente, decidido a mirar de tú a tú al líder.

Sin embargo, en el primer acercamiento de los locales llegó el golpe. Corría el minuto 10 cuando un centro desde la derecha encontró el remate ajustado de Pablo Muñoz al palo derecho, imposible para Galisteo. 

El Motril golpeaba pronto, pero no tumbaba. El Alhaurino respondió con orgullo, tratando de ganar metros y ritmo ante un conjunto que dominaba las zonas del campo con jerarquía. En el 17, Yerai encontró a Zalea y su disparo, tras tocar en un defensor, se marchó rozando el poste.

La polémica se instaló en el minuto 36, cuando en el segundo acercamiento local, Niko Kata firmó el 2-0 en posición claramente adelantada. Las protestas fueron un clamor entre los jugadores alhaurinos, pero el árbitro Cantón Martos validó el tanto entre la incredulidad visitante. 

Y pese al golpe, el Decano no se rindió: tres minutos después, Zalea tuvo el descuento tras una recuperación en el centro del campo, pero su balón se marchó alto ante la salida del meta motrileño. En el cierre del primer acto, Largo rozó el gol tras una jugada tejida por Berguillo, pero el guardameta local respondió con reflejos ajustado al palo corto.

Francis García movió el banquillo al descanso: Juanan y Adrián entraron por Álvaro García y Berguillo, buscando más control y profundidad. El guion no cambió: el Alhaurino seguía apretando con alma. Tomé, recién ingresado también, se escapó por banda derecha en una jugada que a punto estuvo de conectar con Zalea, mientras Oliva probaba fortuna con una parábola que rozó el palo largo.

El momento clave del partido llegó en el minuto 78, cuando Andy centró al corazón del área y tanto Zalea como Jarauta fueron derribados claramente ante los ojos del colegiado, que prefirió no señalar el punto de penalti. Las protestas se mezclaron con la incredulidad de la afición azulilla desplazada hasta Motril, que veía cómo el esfuerzo de los suyos no encontraba recompensa.

El asedio final fue digno de la historia del Decano: Zalea, incansable, encaró de nuevo al meta local y cedió atrás para Tomé, que soltó un latigazo seco y potente que el portero local desvió con una parada antológica, arrancando el aplauso incluso del público motrileño. El Alhaurino murió de pie, buscando el gol hasta el último segundo ante un líder que solo ha encajado tres tantos en toda la temporada.

El pitido final dejó un 2-0 que no refleja la entrega ni la fe del conjunto de Alhaurín el Grande. Un resultado que duele, sí, pero que reafirma la identidad de un club que nunca baja los brazos y que sigue honrando sus 117 años de historia con trabajo, orgullo y corazón.

El Decano ya mira hacia el horizonte, con dos citas vitales en su camino: el duelo ante la UD San Pedro en el Miguel Fijones y la posterior salida a El Palo, dos compromisos frente a rivales directos donde el alma azulilla volverá a rugir. Porque este Alhaurino, más allá del marcador, sigue siendo historia viva del fútbol malagueño.

CF Motril: De La Osa, Boris, Rafa (Magaña 82'), Carlos León, Antonio López, Pablo Muñoz, Pato (Cameron 63'), Tomás Cruz, Niko Kata (Samed 82'), Nieto (Brian 75') y Iván López

CD Alhaurino: Galisteo, Andy, Yago (Lupi 87'), Zalea, Álvaro García (Juanan 46'), Hatim, Yerai (Samuel 73'), Oliva, Berguillo (Adrián 46'), Largo y Andrei (Tomé 58')

Goles: 1-0, Pablo Muñoz (10') y 2-0, Niko Kata (36');

Árbitro: Cantón Martos, Manuel (Almería) amonestó por los locales a Rafa.