La tarde de hoy quedará grabada en la historia del fútbol provincial. Por primera vez, el CD Alhaurino se enfrentará al CD Málaga 1903, un duelo inédito que une tradición y modernidad, memoria y presente. Pero el partido tendrá además un componente emocional especial: en el banquillo visitante se sentará un viejo conocido de la afición azulilla, Antonio Sánchez Frías, el técnico que escribió una de las páginas más intensas y polémicas en la historia reciente del Decano.
Nacido en Suiza pero de Villanueva del Rosario de corazón, Sánchez Frías aterrizó en el Miguel Fijones un 20 de noviembre de 2017, tras la destitución de José Márquez. Su debut no pudo ser más elocuente de lo que sería su trayectoria: ante el Roquetas CF 2016, el Alhaurino remontó en el descuento con goles de Raúl Sánchez y José, firmando un estreno con tintes épicos.
Ese primer curso lo cambió todo. En apenas 22 jornadas, el técnico logró 54 puntos con un balance arrollador de 17 victorias, 3 empates y solo 2 derrotas, con 47 goles a favor y 16 en contra. El Decano cerró la temporada cuarto en la División de Honor, y lo que parecía una gesta se transformó en un caso que aún hoy sigue resonando en la memoria.
El cuarto puesto debía dar el ascenso a Tercera División tras la carambola del Almería B, que dejaba plazas libres en el Grupo IX. Sin embargo, la RFAF intentó reinterpretar las normas para salvar a clubes descendidos. Ahí entró en escena la Decanoteca, que llevó la reclamación a Madrid y documentó con más de 526 precedentes la validez del ascenso. Finalmente, la propia Asamblea de la RFEF reconoció el derecho del CD Alhaurino y el equipo volvió a la categoría nacional.
Sánchez Frías se convirtió así en uno de los ocho entrenadores que han llevado al Decano al fútbol nacional. Pero la historia que parecía de gloria se tornó en drama. En la temporada 2018/19, el Alhaurino firmó 56 puntos en 42 jornadas (14 victorias, 14 empates, 14 derrotas, con 72 goles a favor y 66 en contra). Números de sobra para una salvación holgada, e incluso comparables a equipos que disputaron fases de ascenso.
Sin embargo, el insólito arrastre provocado por descensos masivos en categorías superiores condenó al equipo al descenso, pese a igualar en puntuación al Alhaurín de la Torre CF, que logró salvarse gracias al gol average particular, aunque el Decano le superaba en el general. Un episodio que muchos consideran aún hoy como la mayor injusticia en la historia de la Tercera División española.
Tras dejar el Decano, Sánchez Frías siguió forjando su carrera en los banquillos. El pasado curso condujo al CD Málaga 1903 al campeonato en la Primera Andaluza Malagueña, aunque el equipo quedó fuera de la fase de ascenso en una inexplicable eliminación frente al CD Ronda.
Hoy, el técnico regresa al camino del Decano, no ya como protagonista de su banquillo, sino como rival, en un partido que evoca recuerdos de alegrías, reclamaciones y sinsabores.
La historia vuelve a poner frente a frente a Antonio Sánchez Frías y al CD Alhaurino. Y en La Decanoteca sabemos que cada reencuentro con el pasado es también una oportunidad para seguir escribiendo nuevas páginas en la memoria del club más antiguo de Málaga.
Nacido en Suiza pero de Villanueva del Rosario de corazón, Sánchez Frías aterrizó en el Miguel Fijones un 20 de noviembre de 2017, tras la destitución de José Márquez. Su debut no pudo ser más elocuente de lo que sería su trayectoria: ante el Roquetas CF 2016, el Alhaurino remontó en el descuento con goles de Raúl Sánchez y José, firmando un estreno con tintes épicos.
Ese primer curso lo cambió todo. En apenas 22 jornadas, el técnico logró 54 puntos con un balance arrollador de 17 victorias, 3 empates y solo 2 derrotas, con 47 goles a favor y 16 en contra. El Decano cerró la temporada cuarto en la División de Honor, y lo que parecía una gesta se transformó en un caso que aún hoy sigue resonando en la memoria.
El cuarto puesto debía dar el ascenso a Tercera División tras la carambola del Almería B, que dejaba plazas libres en el Grupo IX. Sin embargo, la RFAF intentó reinterpretar las normas para salvar a clubes descendidos. Ahí entró en escena la Decanoteca, que llevó la reclamación a Madrid y documentó con más de 526 precedentes la validez del ascenso. Finalmente, la propia Asamblea de la RFEF reconoció el derecho del CD Alhaurino y el equipo volvió a la categoría nacional.
Sánchez Frías se convirtió así en uno de los ocho entrenadores que han llevado al Decano al fútbol nacional. Pero la historia que parecía de gloria se tornó en drama. En la temporada 2018/19, el Alhaurino firmó 56 puntos en 42 jornadas (14 victorias, 14 empates, 14 derrotas, con 72 goles a favor y 66 en contra). Números de sobra para una salvación holgada, e incluso comparables a equipos que disputaron fases de ascenso.
Sin embargo, el insólito arrastre provocado por descensos masivos en categorías superiores condenó al equipo al descenso, pese a igualar en puntuación al Alhaurín de la Torre CF, que logró salvarse gracias al gol average particular, aunque el Decano le superaba en el general. Un episodio que muchos consideran aún hoy como la mayor injusticia en la historia de la Tercera División española.
Tras dejar el Decano, Sánchez Frías siguió forjando su carrera en los banquillos. El pasado curso condujo al CD Málaga 1903 al campeonato en la Primera Andaluza Malagueña, aunque el equipo quedó fuera de la fase de ascenso en una inexplicable eliminación frente al CD Ronda.
Hoy, el técnico regresa al camino del Decano, no ya como protagonista de su banquillo, sino como rival, en un partido que evoca recuerdos de alegrías, reclamaciones y sinsabores.
La historia vuelve a poner frente a frente a Antonio Sánchez Frías y al CD Alhaurino. Y en La Decanoteca sabemos que cada reencuentro con el pasado es también una oportunidad para seguir escribiendo nuevas páginas en la memoria del club más antiguo de Málaga.