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El CD Alhaurino sumó su segunda victoria de la pretemporada en un exigente test ante el CD San Félix, conjunto juvenil de División de Honor, que demostró durante gran parte del partido que su nivel competitivo está muy por encima de lo que su edad podría sugerir. Un choque que sirvió para que los de Francis García se reencontraran con la victoria en casa (3-1) y que dejó nombres propios y conexiones ilusionantes de cara a lo que está por venir en el Grupo IX de Tercera Federación.
Desde el pitido inicial, el conjunto celeste impuso un ritmo altísimo, con una presión valiente, una salida de balón limpia y un juego alegre que sorprendió a propios y extraños en el Miguel Fijones. La superioridad física y la osadía de los visitantes se tradujo en el primer tanto del partido, poniendo el 0-1 en el marcador y dejando en evidencia los desajustes iniciales del Decano.
Con un once inicial formado por Juan Galisteo, López, Largo, Yago, Juanan, Lupi, Andrey, Yerai, Oliva, Samuel y Zalea, el Alhaurino tardó en sacudirse ese dominio, pero lo hizo con clase y pegada. En una acción individual brillante, Sergio Oliva se inventó un derechazo cruzado desde banda izquierda que, con una parábola perfecta, se coló junto al palo contrario para igualar la contienda y estrenarse como goleador azulillo.
En la reanudación, el técnico alhaurino introdujo un nuevo bloque compuesto por Padilla, Álvaro, Ivi, Ferrete, Andy, Óscar, Tomé, Raúl Sánchez, Berguillo, Manu Sánchez y Jarauta. Desde el primer instante, el equipo mostró mayor aplomo, experiencia y control del esférico, imponiendo su plan de partido ante un San Félix que, a pesar de su juventud, nunca bajó los brazos.
La conexión Raúl Sánchez - Jarauta volvió a ser determinante. En una acción calcada a los goles ante Loja y Cártama, el extremo sirvió un balón medido desde la izquierda para que Jarauta, con oportunismo y definición, hiciera el 2-1 y sumara su tercer tanto de la pretemporada, confirmándose como uno de los referentes ofensivos de este nuevo Alhaurino.
Con el marcador a favor, el San Félix se volcó en busca del empate, mostrando descaro y ambición. Sin embargo, el Decano supo gestionar los minutos finales, especialmente con la entrada de Hatím, que tras superar molestias musculares aportó orden y temple en la zaga.
Ya en la recta final, en una acción rápida de ataque, Berguillo puso la guinda con el 3-1, certificando una remontada trabajada y poniendo de relieve la importancia de la experiencia en encuentros de este tipo. El San Félix, que venía de empatar ante el CP Mijas Las Lagunas, volvió a dejar claro que es un equipo llamado a seguir formando talentos para el fútbol malagueño.
El CD Alhaurino firmó un triunfo de mérito ante un rival que exigió al máximo y que sirvió para seguir creciendo como bloque. La combinación de jóvenes con proyección y veteranos que aportan seguridad sigue carburando en esta pretemporada. Y lo mejor: aún quedan pruebas para seguir ajustando una maquinaria que promete dar alegrías a la parroquia azulilla.
Desde el pitido inicial, el conjunto celeste impuso un ritmo altísimo, con una presión valiente, una salida de balón limpia y un juego alegre que sorprendió a propios y extraños en el Miguel Fijones. La superioridad física y la osadía de los visitantes se tradujo en el primer tanto del partido, poniendo el 0-1 en el marcador y dejando en evidencia los desajustes iniciales del Decano.
Con un once inicial formado por Juan Galisteo, López, Largo, Yago, Juanan, Lupi, Andrey, Yerai, Oliva, Samuel y Zalea, el Alhaurino tardó en sacudirse ese dominio, pero lo hizo con clase y pegada. En una acción individual brillante, Sergio Oliva se inventó un derechazo cruzado desde banda izquierda que, con una parábola perfecta, se coló junto al palo contrario para igualar la contienda y estrenarse como goleador azulillo.
En la reanudación, el técnico alhaurino introdujo un nuevo bloque compuesto por Padilla, Álvaro, Ivi, Ferrete, Andy, Óscar, Tomé, Raúl Sánchez, Berguillo, Manu Sánchez y Jarauta. Desde el primer instante, el equipo mostró mayor aplomo, experiencia y control del esférico, imponiendo su plan de partido ante un San Félix que, a pesar de su juventud, nunca bajó los brazos.
La conexión Raúl Sánchez - Jarauta volvió a ser determinante. En una acción calcada a los goles ante Loja y Cártama, el extremo sirvió un balón medido desde la izquierda para que Jarauta, con oportunismo y definición, hiciera el 2-1 y sumara su tercer tanto de la pretemporada, confirmándose como uno de los referentes ofensivos de este nuevo Alhaurino.
Con el marcador a favor, el San Félix se volcó en busca del empate, mostrando descaro y ambición. Sin embargo, el Decano supo gestionar los minutos finales, especialmente con la entrada de Hatím, que tras superar molestias musculares aportó orden y temple en la zaga.
Ya en la recta final, en una acción rápida de ataque, Berguillo puso la guinda con el 3-1, certificando una remontada trabajada y poniendo de relieve la importancia de la experiencia en encuentros de este tipo. El San Félix, que venía de empatar ante el CP Mijas Las Lagunas, volvió a dejar claro que es un equipo llamado a seguir formando talentos para el fútbol malagueño.
El CD Alhaurino firmó un triunfo de mérito ante un rival que exigió al máximo y que sirvió para seguir creciendo como bloque. La combinación de jóvenes con proyección y veteranos que aportan seguridad sigue carburando en esta pretemporada. Y lo mejor: aún quedan pruebas para seguir ajustando una maquinaria que promete dar alegrías a la parroquia azulilla.
